domingo, 28 de febrero de 2010

////

Terremoto en Chile, Earthquake in Chile


Relato...

Eran las 3.30 de la madrugada del día sábado 27 de febrero, me encontraba de vacaciones en Viña del Mar (quinta región) junto a mi madre quien dormía en ese momento. Estaba leyendo una revista cuando todo comenzó, pensé que sería un simple temblor pero éste fue in crescendo, paralelamente comencé a alertar a mi mamá quién no despertaba hasta que la situación se tornó incontrolable. Movimientos incesantes nos llevaron hasta la entrada del departamento, era un octavo piso, una construcción de los años 70', estructura que se movía violentamente por lo que no podíamos mantenernos de pie, vimos como toda la estructura perdía forma y firmeza, como todos los adornos volaban por el aire, los muebles se desplomaban, y la peor parte estaba por venir.

La luz no tardó en cortarse y la magnitud del movimiento telúrico alcanzaba su clímax, eran 8º de la escala de Ritcher en su máxima manifestación, la estructura del edificio se sacudía a la misma intensidad por lo que estar de pie fue imposible, la desesperación que tanto evité se presentó y sentí por pocos segundos que era el fin, nos sacudíamos en el suelo a la misma potencia del terremoto, sintiendo como la edificación perdía fuerza, era como una lucha entre la estructura firme hecha por la mano del hombre se debilitaba, se desmoronaba, al fin y al cabo es vulnerable como la propia existencia humana.

Sentí que era el fin, nos abrazamos fuerte con mi madre sintiendo que todo se iba abajo, el movimiento comenzaba a cesar en su potencia por lo que que nos paramos y decidimos retirarnos del lugar, lamentablemente y tras la dificultad que presentaba el departamento mi mamá sacó la peor parte al intentar abrir la puerta por lo que ésta le golpeó uno de los dedos de su mano izquierda provocando una grave lesión y producto de esto una fuerte hemorragia.

Al abrir la puerta nos encontramos con una estructura en vía de escombros, cables rotos que caían desde el techo del pasillo, cañerías rotas, polvo por doquier y lo peor, grietas en el suelo que mostraban los pisos de abajo, abrimos rápidamente la puerta que nos conducía a las escaleras de emergencia, bajamos lo más rápido que pudimos y nos encontramos con lo que era el lobby del edificio, salimos a la calle y la gente gritaba por doquier.

3.40am No habían semáforos, información, la gente bajaba con sus hijos y algunas frazadas, las calles estaban cubiertas de vidrios rotos y partes de la estructura de los edificios, me preocupaba encontrar algún medio para llegar a hospital y que pudieran atender a mi mamá, tuvimos la suerte de encontrarnos con un paramédico quien improvisó un vendaje y trató de parar un poco la hemorragia del dedo de mi mamá, presionándolo fuerte por unos segundos. Seguimos caminando hasta llegar a una comisaría en la cual la fuerza pública de mi país me asombró con admiración, nos llevaron lo más pronto posible al hospital de emergencias más cercano en el cual atendieron a mi madre lo más pronto posible.

5.30am Fue una madrugada muy larga, la demanda de personas heridas se acrecentaba al pasar las horas, el personal médico no daba abasto pero hacía su máximo esfuerzo, al fin y al cabo son personas quienes también estaban preocupados por sus familias de quienes algunos no tenían noticias, aún así seguían atendiendo a quienes eran víctimas de la gravedad de la circunstancia por lo que secretarias, guardias, personal de aseo, familiares de las víctimas y todo aquel que estuviese dispuesto a ayudar, suplieron labores que me imagino nunca pensaron realizar.

6.00am Tantas historias, imágenes, aromas, emociones y acciones ocurrían incesantemente, como si se tratara de una escena teatral perfectamente ensayada y coordinada, se sentía miedo, miedo al perder a un ser querido, miedo a que el momento se hiciera eterno y con ello las emociones negativas perduraran más de lo que uno puede aguantar, miedo de que de las malas noticias devastaran a quienes esperaban recibir información de sus seres queridos lesionados, miedo que se repitiera otro movimiento telúrico similar, aún así había unidad entre todos y eso -a mi parecer- era lo que mantenía el equilibrio del lugar para que todo siguiera funcionando.

8.45am La situación seguía funcionando, las puertas de la sala de emergencia se abrían y cerraban, llegaban familiares de algunos de los heridos, otros contenían a quienes más lo necesitaban, por fin nos vamos (9.30am), mi madre recibió toda la ayuda que necesitó y ahora nos tocaba la peor parte, ir a buscar las cosas al departamento -idea que nos angustiaba tremendamente- salimos del establecimiento y tomamos un bus que nos dejó cerca, al caminar nos encontramos nuevamente con el post-desastre, es resumen no había infraestructura que no presentara algún tipo de daño. Llegamos, y el edificio había sido clausurado e inhabitable, pudimos subir rápidamente, inevitablemente recobraron vida las emociones desagradables del momento del terremoto, una sensación de vacío y nostalgia, era otro lugar, no era el mismo, parecía un sitio bombardeado, una fotografía de un mal recuerdo, nada era igual, nada quedaba salvo algunos muebles cubierto de estructuras y polvo desprendido de estas mismas. Sacamos lo que más pudimos, lo necesario y salimos.

11.00am Subimos todo al auto, por suerte no le había pasado nada, lo digo porque era el único medio para abandonar la ciudad, la estación de buses estaba detenida y no había forma de regresar más que por transporte propio, al igual que el resto de la gente la velocidad era más rápida que la común, no había opción, el objetivo colectivo era el mismo: llegar a casa lo antes posible, antes de una gran réplica, antes que el destino quisiera cambiar nuevamente.

12.30 A pocos minutos de llegar, las autopistas, sobretodo "Costanera Norte" había sufrido serios daños, los caminos se encontraban agrietados por lo que había que parar ya que se encontraban reparando de emergencia algunos tramos.

Llegamos a la casa, mi padre salió, nos abrazamos y creo que por primera vez en la vida sentí aprecio de estar en mi casa y con mi familia, era y es el lugar más seguro, están los míos y todo es precioso, está mi hermano, estamos los cuatro y es lo único que importa.

--
El relato de lo que comparto es simplemente eso, a veces el compartir no debe ser simplemente lo lindo de la vida y lo que nos gusta escuchar o ver, pero creo que en momentos en los cuales estamos en lo frágil de nuestra existencia, en ese momento preciso que lo único que nos une a este mundo es un delgado hilo de esperanza, en ese momento comenzamos a vivir de nuevo, ya nada es igual, a partir de esta experiencia comienza una nueva vida para mi, no hay tiempo que perder y sé que ayudar al prójimo hasta lo que más se pueda es una de las razones de esta vida, mirar al lado y reconocerse en el otro es lo que nos hace ser humanos.

Con amor siempre.

0 Reactions to this post

Add Comment